Un paisaje volcánico donde ríos de plata derretida tallan a través de la ceniza negra coronado por un cielo de tormentas violetas en espiral.
Más allá de lo ilimitado, un caos sin límites, una eternidad sin forma, una bruma infinita, un laberinto cósmico, un enigma interminable
Un festival vibrante con banderas de colores ondeando, personas bailando bajo un dorado atardecer, montañas distantes, animado y alegre.
Un campo de batalla celestial donde ángeles armados chocan con bestias sombrías, sus armas chispeando con azul eléctrico y carmesí.
Una pluma ligera y etérea flotando contra un suave fondo degradado, colores pastel, atmósfera etérea.
La constelación de Tauro ilustrada en finas líneas blancas, con un sutil símbolo de Tauro brillando en el medio, todo sobre un fondo índigo profundo.