Las botas de goma de colores brillantes de un niño chapoteando en un charco, la salpicadura dispersando gotas de lluvia en todas direcciones, con un paisaje urbano difuso en el fondo, al estilo de Makoto Shinkai.
Más allá de lo ilimitado, otro caos reina, infinito sin forma, vacío eterno, laberinto cósmico, enigma sin límites
Una deslumbrante exhibición de luces del norte sobre una tundra nevada, verdes y morados vibrantes girando, suelo helado reflejando el resplandor, mágico.
Un árbol de cerezo en plena floración contra un fondo de montaña brumoso, suaves pétalos rosas cayendo, sereno y detallado, al estilo del arte tradicional japonés.
Un campo de batalla celestial donde ángeles armados chocan con bestias sombrías, sus armas chispeando con azul eléctrico y carmesí.